"Están chupando la sangre a Pau Gasol"

La madre de los Gasol defiende con valentía a sus tres hijos y acusa duramente a sus representantes

Marisa Sáez, médico de profesión, es una mujer de fuerte carácter. Junto a su esposo, Agustí Gasol, ha manejado con entereza la transformación de sus dos hijos mayores en auténticas estrellas de la NBA y está siempre dispuesta a defenderlos de cualquier ataque o situación que ella considere que no beneficia a Pau, a Marc o a Adrià, el tercero de sus vástagos que ya apunta altura y buenas condiciones para el basket. Marisa salta ahora al primer plano de la actualidad por unas declaraciones que publica el diario económico La Gaceta de los Negocios en su edición de ayer domingo y firmadas por Francisco Rabadán.

“Estos tipos son unas sanguijuelas, no paran de chuparle la sangre a mi hijo”, explica Marisa Sáez refiriéndose a Arturo Ortega y Enrique Rodríguez, los representantes de sus dos hijos profesionales. “Se aprovechan de Pau porque en realidad no son sus representantes, sólo se ocupan de temas de imagen. Adrià (refiriéndose a su tercer hijo) es un menor y ya lo quieren empezar a utilizar como a mis otros dos hijos”. La madre de los Gasol niega que Ortega sea el representante de Pau. “No lo es. El y su amigo Enrique se apropiaron sus derechos y le colocan imposiciones cuando en realidad no son nada. Ellos representaron a Pau, concretamente Arturo, cuando jugaba en el Barça, pero en Estados Unidos él se fue con otros mánager, aunque ellos se quedaron con sus derechos de imagen en España. No paran de pedirle dinero y cada vez más. Empezaron llevándose un 15% de sus derechos, luego subieron a un 18 y ahora quieren un 20”.

La Gaceta de los Negocios explica, en sus páginas deportivas, la opinión de Marisa sobre la actual situación de Pau. “Lo peor son los contratos que le ofrecen y que tienen muchos agujeros negros. Sacan mucho dinero de mi hijo. Le hacen anunciar coches como SsanYong cuando tiene ofertas de otras marcas mejores como Porsche o Mercedes. Hay muchos asuntos negros detrás. Además ahora quieren hacerse con Marc. Le han prometido muchas cosas y él se lo está tragando todo. Le han dicho que va a firmar con muchos patrocinadores. Le pregunté a Marc por este asunto echándome las manos a la cabeza, diciéndole ‘¡cómo te has metido en esto!’ Él me dijo que aún no había firmado nada y ya lo habían metido en su página web. Tienen mucha cara”. El objetivo de Marisa está claro que es ahora salvar a a Marc. “Quiero evitar que hagan algo así con mi otro hijo. A Pau le comen la cabeza, le tienen muy adulado y él no se da cuenta de que le están chupando la sangre. Ellos se han querido meter en la representación estadounidense de Pau prometiéndole que va a llevar a jugadores jóvenes europeos -como Sergio Rodríguez, a quien Ortega representó durante tres años— y que ellos se quedarían con un porcentaje”, indica Marisa, que deja claras sus intenciones: “Yo no quiero hacer daño a Pau, soy su madre, pero no me parece bien que tipos como éstos le estén representando. Son gente muy aprovechada y que han pasado de vivir en sitios normales a tener chalés en La Moraleja. Y todo lo hago por mis hijos”.